Apenas terminan los límites de Marunouchi, comienzan los de Ginza. Dos barrios vecinos que nada tienen que ver. Marunouchi es el distrito financiero de Tokyo y Ginza por su parte, concentra la mayor cantidad de boutiques, restaurantes y tiendas de alta gama.
Nosotros no vimos Ginza y Marunouchi el mismo día pero nos dimos cuenta a posteriori que hubiera sido muy buena opción pues están uno al lado del otro. El día que recorrimos Ginza, nos pusimos a andar dirección norte y sin darnos cuenta a Marunouchi. Así que recomendamos esta combinación.
Si comienzas la visita en Marunouchi, la mejor opción es ir en metro: parada Tokyo (Marunouchi Line M17) o JR (Yamanote Line). Lo primero que verás cuando salgas del metro es la Estación de Tokyo, una de las más concurridas de Japón por la que pasan los famosos Shinkansen (trenes bala), el metro o trenes regionales. El edificio panorámico en ladrillo rojo destaca entre los rascacielos de metal que caracterizan a Marunouchi.
Los edificios más famosos son Marunouchi y Shin-Marunouchi, gemelos y situados justo frente a la estación. La 5ª planta de Shin-Marunouchi está repleta de restaurantes, nosotros aprovechamos para comer en uno de ellos. Tanto la comida, como las vistas, inmejorables. Hablaremos de él próximamente.
Ocupando una posición central en la ciudad, el Palacio Imperial de Japón (Kokyo) se sitúa justo al oeste de Marunouchi. Es la residencia del Emperador de Japón y solo una pequeña parte de toda su extensión, los jardines del ala este, está abierta al público. Es una zona muy tranquila, agradable para dar un paseo, ver el foso Babasaki (primera foto), las murallas defensivas o el puente Nijubashi.
Si seguimos caminando hacia el sur, llegamos al barrio de Ginza, sin embargo, su extensión es inmensa y puedes acceder a este distrito desde muchas paradas de metro: Ginza (M16, H08 ó G09) o Higashi-Ginza (A11, H09), entre otras.
Situado justo al lado de la parada de metro Higashi-Ginza (salida 3), se encuentra Kabuki-za, el principal teatro de kabuki de Tokyo. Nosotros nos quedamos con las ganas de asistir a una obra, pero no tuvimos tiempo. Las entradas son caras y las actuaciones en japonés, pero se pueden comprar entradas para un sólo acto y para el mismo día a precios bajos.
El resto de Ginza se caracteriza por amplias avenidas, letreros con infinitas tiendas, restaurantes, boutiques y coches de alta gama. Lo que más ilusión nos hizo, sin duda, fue encontrar en un distrito tan distinguido, una tienda de instrumentos españoles, Sonido de España.
Y por último, y altamente recomendable, fuimos a ver el edificio de Tokyo International Forum. Es como un barco de cristal entre todos los rascacielos y puentes de ferrocarril que lo intentan esconder.
Ya con el estómago lleno de la mejor carne de Kobe que hayamos probado nunca, nos despedimos de las luces de Ginza y pusimos rumbo al hotel. ¡Nos merecíamos un descanso!
Esperamos que este post sea de gran ayuda para futuros viajeros. Si tienes cualquier duda u opinión, no dudes en escribirnos un comentario o correo, y recuerda que puedes seguirnos la pista a través de Facebook aquí, o el resto de RRSS que aparecen en los banners. ¡Gracias por leer y hasta la próxima!
Photos by Wander on World