Visita a Burano desde Venecia

Unas horas en el pueblo del arcoíris. Burano, 2018.

¿Has oído hablar de una pequeña isla al este de Venecia cuyas casas están pintadas de llamativos colores y hay varios canales que atraviesan el pueblo con barquitos amarrados a ambos lados? Se trata de Burano y si vas a estar en Venecia, deberías acercarte ;).

Como ya contamos en el anterior post de Venecia, creemos que es una buena idea visitar Burano desde Venecia, no te llevará más de unas horas y volverás enamorado de la pequeña isla.

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CÓMO LLEGAR A BURANO

Existe transporte público, el mismo que utilizan los propios locales. Se trata del vaporetto que sale desde la terminal Fondamenta Nuove o desde la de San Zaccaria.

Hay que comprar el ticket antes de montar al barco y pasarlo por un lector magnético que hay antes de atravesar la plataforma de acceso. Nosotros lo cogimos desde Fondamenta Nuove, donde veréis un pequeño puente para atravesar un canal que desemboca al mar. Los tickets se compran en la caseta que hay a un lado del puente y el vaporetto sale del muelle que hay al otro lado del puente. Salen varios vaporettos con distintos destinos, algunos llegan a Murano pero no hasta Burano, así que leed bien las pantallas.

El que cogimos nosotros era la línea N12, por si no cambian el nombre con frecuencia, buscad esa. Nos costó 15€/persona ida y vuelta.

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CÚANTO TIEMPO PARA BURANO

La isla es muy muy pequeñita y por eso dicen que en una o dos horas, la has visto. A nosotros una hora se nos hubiera quedado muy corta, pues no solo te vuelves loco fotografiando todo, si no que hay un montón de cafeterías y restaurantes, y ya que se ha ido hasta la isla, lo mejor es aprovechar el viaje y tomar algo allí.

El trayecto es de 45 minutos, de modo que para ir y volver se necesita una hora y media, más otras dos horas que se pasan en la isla, os recomendamos reservar unas 4 horas para la visita a Burano desde que salís de Venecia hasta que volvéis.

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QUÉ VER EN BURANO

Se trata de una pequeña isla en la Laguna de Venecia, cuenta con 4000 habitantes obligados a pintar las fachadas de sus casas de colores, creando un escenario de película de dibujos animados.

Si la sumas que la isla está surcada por pequeños canales, con barcos amarrados a cada lado, puentes peatonales para cruzarlos y puestos locales de venta de productos, entonces querrás si o si visitar Burano desde Venecia y no olvidarte la cámara, pues fotografiarás cada rincón.

Otro de sus elementos característicos es el campanario inclinado de la Iglesia de San Martino, parece que se vaya a caer de un momento a otro. Y es que, como todas las edificaciones de Venecia, el campanario está cimentado sobre un conjunto de pilares de madera agrupados, que con el tiempo, han ido cediendo.

Aunque lo que realmente ha hecho famosa a esta pequeña isla han sido sus casas de colores, entre los locales se caracteriza por la fabricación de encajes de hilo, de ahí que los puestos de los mercados vendan este producto. De hecho, los interesados en este tema, podrán visitar el Museo del Encaje.

Se estima que en un futuro no muy lejano este museo sea lo único que recordará esta actividad propia de la isla, pues ya no muchos habitantes están interesados en seguir con la tradición y se acabará perdiendo.

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POR QUÉ LAS CASAS ESTÁN PINTADAS DE COLORES

Lo primero que te preguntas cuando llegas a la isla es el motivo por el cual han llegado a ese punto, pues de hecho no es la única isla de Italia donde ocurre. Burano nos recordó muchísimo a la pequeña isla de Procida, frente a Nápoles, donde las casas igualmente están pintadas de colores, o la famosa Cinque Terre.

Y es que cuenta la leyenda que en días de niebla los pescadores tenían dificultades para llegar a su casa, pareciendo todas iguales por la poca visibilidad, de modo que se les ocurrió pintarlas de un color característico para reconocerlas más fácilmente. Sin embargo, puede que no sea más que una leyenda transmitida de generación en generación y simplemente sea un elemento característico de la arquitectura de los pueblos costeros de Italia.

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No tenemos mucho más que contar sobre la pequeña isla de Burano, más que animaros a visitarla si contáis con unas horas extra en vuestra estancia en Venecia, es un lugar muy atractivo para la vista y curioso, como poco. Disfrutaréis del ambiente tranquilo que hay en la isla y sentiréis por momentos que a la vuelta de la esquina habrá cámaras grabando una película ;).

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Photos by Wander on World

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